El papel del Banco de España en la economía

El Banco de España es el banco central del Estado Español y el supervisor del sistema bancario español, es decir, evalúa y controla la solvencia de las entidades de crédito y supervisa que éstas cumplan con la normativa. Se trata de una entidad de derecho público con personalidad jurídica propia y con capacidad pública y privada, que actúa con independencia y autonomía respecto a la Administración del Estado. La Ley de Autonomía del Banco de España es la regulación a la que está sometida su actividad.

Como banco de un país miembro de la Unión Europea, el Banco de España interviene en la definición y en la ejecución de la política monetaria de la Unión. El Banco pertenece al Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC) desde que se puso en marcha la Unión Económica y Monetaria en 1999 para lograr una estabilidad en la economía y en los precios de los países miembros.

Además, el Banco de España tiene la facultad de decretar normas para regular su funcionamiento. Estas disposiciones se conocen como Circulares Monetarias cuando afectan a la política monetaria, y como Circulares, a secas, cuando estas normas se dictan en el ejercicio de sus competencias. Ambas se publican en el Boletín Oficial del Estado.

Funciones

El Banco de España desempeña distintas funciones, que se pueden agrupar en aquellas realizadas como banco perteneciente al SEBC o aquellas específicas que conciernen a la nación española.

a) Como miembro del Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC), desde el 1 de enero de 1999:

  • Elaborar y ejecutar la política monetaria de la zona del euro para mantener la estabilidad de precios.
  • Controlar las reservas oficiales de divisas del Estado y realizar operaciones de cambio de divisas.
  • Promover el buen funcionamiento de los sistemas de pago en los países que posean la moneda única.
  • Emitir los billetes en euros.

b) Funciones como banco central nacional según la Ley de Autonomía:

  • Poseer y encargarse de las reservas de divisas y metales preciosos no transferidas al BCE.
  • Favorecer el buen funcionamiento y la estabilidad del sistema financiero y de los sistemas de pago nacionales.
  • Controlar la solvencia y el cumplimiento de la normativa específica de las entidades financieras.
  • Poner en circulación la moneda metálica.
  • Confeccionar y publicar las estadísticas relacionadas con sus funciones y colaborar con el BCE en la recopilación de información estadística.
  • Proporcionar los servicios de tesorería y de agente financiero de la deuda pública española.
  • Aconsejar y asesorar al Gobierno, así como realizar los informes y estudios que se requieran.

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